"me vienen a convidar a arrepentirme,
me vienen a convidar a que no pierda,
mi vienen a convidar a indefinirme,
me vienen a convidar a tanta mierda.
Yo no sé lo que es el destino,
caminando fui lo que fui.
Allá Dios, que será divino.
Yo me muero como viví".
me vienen a convidar a que no pierda,
mi vienen a convidar a indefinirme,
me vienen a convidar a tanta mierda.
Yo no sé lo que es el destino,
caminando fui lo que fui.
Allá Dios, que será divino.
Yo me muero como viví".
Silvio Rodriguez, "El necio".
Conozco a algunos que se juntan en la Fuente Suiza; beben schops de a medio y disfrutan los espectaculares sandwiches de lomito sin grasa que venden allá.
La Fuente Suiza, Ñuñoa.
Recuerdo cuando en PASA salíamos a ese local a almorzarnos las tardes.
No es uno de los locales con los que me gusta identificarme. Si quieres saber cuál es la picá del Edu en este órden de cosas, me quedo con el Nuria, pero el de Mac Iver.
Considerando que ir a la Fuente Suiza implica un gasto que en general los dos tercios de la población chilena (mayoría absoluta, digamos) probablemente no esté dispuesto a darse en forma cotidiana, sino únicamente como motivo de celebración, me interesó bastante saber qué era lo que motivaba a D. a invitarme formal y económicamente junto a ese grupo de ex-alumnos a ese lugar. "Probablemente sea el placer del Encuentro, el reestablecer vínculos con quien compartiste momentos de franqueza y de cómo te iba en la vida", tendía a pensar. O bien, si hablamos de amigos (en el sentido riguroso que le doy al término), ver cómo vamos acompañándonos y encaminándonos desde nuestra alteridad hacia ese horizonte compartido, aunque sea en forma eventual y no cotidiana.
Lo que me desconcierta de todo esto es llegar allá y darme cuenta que el motivo de la reunión no es ninguna de las anteriores; ni ninguna otra tampoco. Al indagar en el qué nos motiva, me doy cuenta de que la respuesta está en una especie de disfrute brumoso e instantáneo; un baño de espuma, independiente de para donde vayas tú o yo; una especie de paréntesis irrisorio en tu vida cotidiana; algo así como ver Alicia en el País de las Maravillas de Disney con Tim Burton, en donde tomas una historia protosurrealista que enloquece y la transformas en una repetición de la misma lucha entre el bien y el mal aliñada por otras naderías brillosas.
No se me malentienda: no me refiero a un evento que discontinúa tu experiencia biográfica, como una gran sorpresa positiva o negativa y que después tendrás que integrar a tu vida. No, no es eso. Es como una especie de irrupción de un espacio de no-yo; es la llegada a un setting de mirarnos sin vernos y sin mucha trascendencia para ti y menos aún para quienes ponen sus esperanzas en tí. Es hacer salud por que sí y tomar tu schop de a medio, a pesar de que no sabes qué onda, y dices ¡salud! Algo así como darle palmaditas al culo de tu compañero después de consumir soma.
Es como chupar un candy o rascarse la cabeza.
Si además de eso, la esposa de tu "amigo" te invita al departamento nuevo y estilizado de tu "amigo" (uno supone que es amigo y que los demás son tus amigos, aunque no compartan nada), quien además te invita a una tanda de pool en su "sala de juegos", adornada con cuadritos kitsh de mesas de poker con cuasi-Marilyns sentadas con piernas cruzadas y la mesita de vidrio correspondiente...
Y si además de eso...
...
Holden Caulfield, ahora te entiendo...
Pensando en una microempresaria que conocí en Cerro Navia que invertía 5 lucas en la comida de la semana para su hijo; pensando también en lo que motiva a la Mayi a viajar a Mexico; pensando en Victor y en su otra estrella de la esperanza; pensando en mis Amigos, sin comillas y pensando en mí, no que queda más que contener mi horror ante semejante hoyo espiritual.
Bueno, a este tipo de experiencias neodandistas al peo, a la que me convitan por desgracia, me gusta llamarla "divertimento".
Las preguntas del caso: ¿qué mierda están haciendo con sus vidas? ¿Donde están sus cojones, que no pueden sino repetir lo que las sociedad tiránica heredada del estado terrorista les sirve en bandeja de plata? ¿De adonde sacaron esas imágenes re-reproducidas hasta la no-muerte?
¿Y que mierda hago yo aquí pidiéndole peras a los olmos de plástico?
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